El entrenamiento funcional es aquel que busca mejorar las funciones diarias de cada persona o deportista, en nuestro caso en concreto de las mujeres, a través de la mejora de la fuerza, velocidad y potencia con el fin de mejorar el rendimiento/salud para optimizar todo tu cuerpo.

Mediante este tipo de entrenamiento enseñamos a utilizar de manera correcta el propio peso corporal con ejercicios calisténicos, de propiocepción y equilibrio utilizando diferentes versiones de ejercicios como las sentadillas, flexiones, zancadas, empuje y tracción. Así, de manera resumida, los programas de entrenamiento funcional entrenan movimientos, no músculos.

   Dentro de estas clases incluimos entrenamientos de acondicionamiento metabólico. Estos son entrenamientos de alta intensidad, basados en rutinas de control del tiempo que mejoran parámetros físicos y de salud, cuyos objetivos son la disminución de la masa grasa y el aumento de la masa muscular y por tanto el aumento de la eficiencia metabólica.

¿Qué trabajamos en las clases de entrenamiento funcional? 

• Trabajo de fuerza y capacidad cardiorespiratoria.
• Rutinas fullbody y ejercicios multiarticulares.
• Ejercicios con el propio peso corporal y con material (Kettlebells, macuernas, TRX…)
• Trabajo de CORE con especial atención sobre el suelo pélvico.
• Ejercicios de equilibrio y propiocepción.

¿Qué beneficios aporta el entrenamiento funcional? 

• Mejora de los parámetros físicos y de salud.
• Mejora de la fuerza y de la capacidad cardiorespiratoria.
• Aumento de la masa muscular y pérdida de masa grasa.
• Mayor eficiencia metabólica y mayor gasto de energía.
• Adquisición de hábitos saludables y mejora de la calidad de vida.
• Aumento de la conciencia corporal y mejora de la postura.
• Mejora de la calidad del sueño y del descanso.

¿A qué mujeres van dirigidas estas clases? 

   A todas aquellas mujeres sin ninguna disfunción del suelo pélvico y a las madres totalmente recuperadas del postparto.

    Antes de poder formar parte de estos grupos es imprescindible la valoración previa completa de suelo pélvico y abdomen por nuestra fisioterapeuta especialista.

Organización de las clases. 

   Grupos reducidos de mínimo 3 mujeres y máximo 5, con la posibilidad de entrenar 2 o 3 veces por semana.